Prohibido Olvidar - Maureen Maya Y Gustavo Petro - Firmado

Descripción

Autor: Maureén Maya y Gustavo Petro
Casa Editorial Pisando Callos, Bogotá, 2006
464 páginas. Tapa Blanda con Solapas. 240x170 mm
Firmado por Maureén Maya

Prohibido olvidar. Dos miradas sobre la toma del Palacio de Justicia.
Prohibido Olvidar es un libro que va en contravía del olvido. Un libro que señala una borrosa nata instrumentada de muchas maneras –unas más perceptibles que otras-, desde los pasadizos de un Estado interesado en propiciar la desmemoria. El olvido no es otra cosa que otro de los nombres de la impunidad.
Un libro así, en un país donde la historia oficial está escrita más que por la punta del lápiz por el lado de la goma, por extremo del borrador, es una invitación a despertar del aturdimiento y la modorra intelectual para salir de uno de los tantos círculos del olvido.
La gran pensadora literaria Simone Weil afirmaba que hay una secreta relación entre la verdad y la derrota. Parece ser que ese aserto, a lo largo de nuestra historia, resulta irrefutable. Como si siempre la verdad estuviera en el bando de los derrotados.
La aseveración de Simone Weil, por un sencillo silogismo nos conduce a afirmar que la mentira está, de manera equivoca, de parte de los ”triunfadores” del mundo está, de los Bush y los presidentes del bolsillo que lo siguen. Prohibido Olvidar nos recuerda que hay verdades que no desaparecen si la memoria las retiene, y que por lo tanto no padecen más que una derrota temporal.
Es por eso una suerte de tatuaje en la memoria. Dos miradas acuciosas a la toma del Palacio de Justicia (ni es Palacio ni hay Justicia), rastrean una historia de vejaciones, de verdades a las que siempre les falta un pedazo, de razones de estado amparadas bajo nombres eufemistas y palabras deshabitadas.
Libros como este plantean un abierto alegato contra el olvido. Ayudan a explicar sucesos de nuestra reciente historia escondidos en los pliegues de la tergiversación y del olvido. Libros como este nos revelan dos décadas de crímenes, de torturas, de desapariciones, de las mil y una formas con las que llamamos al miedo.
Al fondo de estas investigaciones, al fondo de estas reflexiones, arde el Palacio de Justicia, se apaga la voz de un grupo de brillantes magistrados, hay grandes silencios de complicidad y una suerte de hipnosis colectiva amparada por la desinformación. Prohibido Olvidar es un valiente y sincero ejercicio de dignidad.